GIMES
Gimes,
a través de los
parlantes, en virtual sexualidad.
Tu carne no es
enigma.
Sin pudor deidad
cibernética, comunión profana,
gimes,
desde el fondo de
tu sexo y tu garganta.
No flagelarán tus
dardos aromáticos,
no acogerá tu noche
mástiles huéspedes.
Depara tu carne
cristalizada para la estéril ceremonia.
Celebran,
atravesando el aire,
lácteas semillas en
desperdicio litúrgico.
***
Sandez tu meñique
que te sirve de lengua.
La servidumbre
empacada al vacío es tu dote.
La factoría de
ilusiones
surte su estante de
apócrifos encantos,
te abastece con
poéticas de molde.
Verso maquilado,
diletante con
atuendo de plástico fino
no usurpes más al
corazón en su jadear.
***
LA LEGÍTIMA FARSA
En
este, el país de la legítima farsa,
nos han amortajado con la cadena del
temor,
nos convirtieron la lengua en cadáver;
Afloran señoríos, tiranías
se yerguen por doquier
en esta suerte de neofeudalismo que
llamamos nación.
Autómatas verdugos desangrando,
a chorros y a (cuenta) gotas,
decantando, en sus fauces,
la humanidad echa su banquete.
a sus pies perros bravos
con certeros zarpazos
desmembrando dignidades y objeciones.
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